Presentación CKU 28Sport-Fitness

¿El método de entrenamiento definitivo?

A nadie se le escapa que la preparación física de los pilotos de velocidad supone una enorme parte de su rendimiento en la pista. No se trata de sólo ser el más rápido e inteligente, sino también de poseer la fortaleza física suficiente para mantener el ritmo en carrera de principio a fin. El nuevo dispositivo CKU podría resultar definitivo para el entrenamiento de los pilotos.

La CKU (Crivillé Kimi Ullate) no es una máquina de gimnasio al uso, sino más bien una herramienta muy especializada para complementar la preparación física en un deporte tan concreto como es el motociclismo de velocidad. Actualmente, la actividad en el gimnasio, el yoga, el ciclismo, el dirt track, el motocross u otros métodos conforman gran parte de la receta de preparación para la mayoría de los pilotos. Sin embargo, hasta ahora no existía maquinaria específica para sus necesidades.



De la mano de Álex Crivillé, el primer y único piloto español campeón del mundo de 500, en el pasado Gran Premio de Valencia pudimos probar la CKU 28 Sport-Fitness. A primera vista puede parecer un sofisticado videojuego, ya que su estructura principal se compone de una base, una pantalla y un puesto de conducción.

Pero no van por ahí los tiros. El movimiento del puesto de conducción no está sincronizado con la acción en la pantalla, sino que ésta sirve como referencia para que el piloto haga ejercicio con una referencia real. En este caso el vídeo reproduce la vuelta rápida al circuito de Cheste de Dani Pedrosa y la Honda RC 213V durante el GP de Valencia de 2012.



Antes de «salir a pista» se requiere introducir un parámetro fundamental como es el peso del piloto, admitiendo un máximo de 90 kilos. Aparte de éste, también se puede personalizar la agresividad del movimiento, los reglajes de freno delantero y trasero, maneta de embrague y selector del cambio.

Una vez en marcha, el mecanismo permite inclinar libremente a ambos lados hasta 58º y es a partir de este momento cuando la CKU más te sorprende. La función del acelerador activa el mecanismo interno para devolver la montura a la posición vertical, imitando el efecto de la inercia al acelerar en inclinación sobre una moto de competición real. El ejercicio es constante y apenas bastan unos segundos para entender la verdadera dimensión del esfuerzo físico que hace un piloto a lo largo de los 45 minutos que viene a durar una carrera.



Es el propio Álex Crivillé quien nos cuenta el origen de este proyecto: «Se trata de una idea de Kimi Muntada, de Mecanizats Muntada, que además de ingeniero es un manitas trabajando con los soportes y giróscopos de las cámaras on board. Ya en su momento diseñó una máquina de entrenamiento específica para pilotos de rally. Por otra parte, hay muchos pilotos que utilizan con regularidad máquinas especiales para el entrenamiento, como Carlos Checa o Álvaro Bautista, por ejemplo».

«Kimi quería trabajar en un proyecto de este tipo especialmente pensado para pilotos de velocidad y contactó conmigo buscando un poco de ayuda, y así comenzamos a trabajar juntos en ello. Al principio yo no sabía cómo podría sacar adelante el proyecto o de qué forma podría ayudarle. A Kimi no le gusta la palabra «simulador», ya que se trata más de una máquina de trabajo, pero creo que según vaya avanzando el proyecto terminaremos haciendo las dos cosas».

«Kimi vino a buscarme, también contactó con Javier Ullate y los tres nos pusimos a trabajar en ello. Mi cometido ha sido ir probando el «invento», orientándoles según mis sensaciones durante su desarrollo, y también hemos contado con otros dos ingenieros para determinar cuestiones relativas a la física para crear esta máquina de entrenamiento. Ullate diseñó la, digamos, parte ciclo, medidas, pletinas, etc, con disensiones muy similares a las de una MotoGP o una Moto2. La carrocería reproduce el depósito y el colín de una Moriwaki, permitiendo regular distintos parámetros para adaptarse al piloto y otros relativos a la maneta de embrague, palancas de freno y otros parámetros. El trabajo de desarrollo ha durado un año».

«Se trata de una máquina para que el piloto pueda trabajar exactamente la musculatura que se emplea pilotando una moto de competición. De momento hemos presentado este prototipo con la colaboración de todos y espero que a partir de ahora también podamos seguir avanzando en su desarrollo, ya que nos gustaría introducir nuevos efectos, como el movimiento de balance que se produce al acelerar y frenar. De momento la han probado varios pilotos de MotoGP e incluso Rossi ha publicado una foto sobre ella a Internet. Tito Rabat también lo hizo y se mostró muy interesado en ella. La opinión de los pilotos es importante y nos ayudará para seguir mejorando. Más allá de las posibilidades como herramienta de entrenamiento para ellos, también permite al público probarla en eventos y comprobar cuánto se llega a inclinar en una moto de competición actual y cómo es esa sensación. En estas semanas puliremos algunos detalles porque ya tenemos varios pilotos muy interesados en adquirir la suya».



Aunque la primera versión de la CKU se encuentra ya plenamente operativa, su precio rondará los 18.000 euros, su posibilidades en el futuro resultan igualmente sorprendentes. Indudablemente, muchas de ellas pasan por la sincronización de la pantalla y el puesto de conducción, aunque no en el sentido habitual.

Si estamos acostumbrados a ver reflejados en las pantallas los movimientos del puesto de conducción, ¿Qué resultado se obtendría intercambiando ese concepto? En caso de poder reproducir el puesto de conducción el movimiento del vídeo, ¿podrías seguir al milímetro todos los movimientos de Dani Pedrosa en una vuelta rápida al circuito de Cheste con derrapadas y sustos incluidos? Bueno, puede que en esa configuración la sofisticada máquina de entrenamiento se convirtiera en una desafiante variante del tradicional toro mecánico, eso sí, mucho más segura y divertida. A partir de esta lograda primera versión de la CKU todo es posible.